Estos 7 alimentos suelen ser tus enemigos si tu objetivo es bajar de peso, ¡ten cuidado!
Puede ser la razón por la que no ves resultados y tus horas de entrenamiento no te sirven de nada.
La alimentación es el complemento principal para que el ejercicio consuma las calorías necesarias, lo demás no le sirve al cuerpo y produce un efecto contraproducente.
Ten en cuenta que estas recomendaciones, más allá de un fin estético, buscan evitar problemas de salud como la diabetes, problemas hepáticos y cardíacos.
1. Azúcares y sus derivados:
El azúcar contribuye al aumento en los niveles de triglicéridos que pueden llevar al sobrepeso u obesidad. Y es que su exceso contribuye a desarrollar diabetes cuya mortalidad es alta. Recuerda, las gaseosas, jugos industriales, dulces y sus derivados contribuyen a que no pierdas peso, déjalos ir.
2. Harinas refinadas:
Aquellas como la harina de trigo, tras su paso por las fábricas para volverlas más finas, pierden sus nutrientes y componentes, e incluso son mezcladas con azúcar. Debido a su baja concentración de fibra, tarda en digerirse. Así que lamentamos decirte que el pan blanco, pizza, donas, o pasteles, no te favorecen para bajar de peso, en su lugar puedes consumir pan integral.
3. Embutidos:
Las carnes procesadas como las salchichas, el salami, la morcilla, el jamón o el tocino, son perjudiciales para tu salud. Son causantes de enfermedades cardiovasculares y hasta provocan muertes prematuras. Al estar hechos con carne de cerdo, poseen una alta concentración de grasa que se adhiere a las paredes de los vasos sanguíneos y esto influye en tu aumento de peso.
4. Grasas y frituras:
El sedentarismo combinado con el alto consumo de comidas grasas son los principales causantes de la obesidad, la cual desarrolla problemas como diabetes, e incrementa el riesgo de sufrir infartos. Debes dejar las frituras como papas, nachos, hamburguesas, empanadas y pollo frito, para que empieces a bajar de peso.
5. Bebidas alcohólicas:
El alcohol es un irritante gastrointestinal y produce hinchazón, además que aumenta el apetito, lo que conlleva a comer en exceso principalmente frituras, harinas y un sinfín de alimentos que contribuyen a una subida de peso. Su aporte nutricional es pobre. En el caso de la cerveza, está hecha principalmente por malta de trigo, un hidrato de carbono refinado, y ya hablamos sobre las harinas refinadas.
6. Salsas y aderezos:
Están hechas con grasas, azúcares, sal y aditivos tanto naturales como sintéticos. Se las considerada de bajo aporte nutricional así que te recomendamos en su lugar consumir aguacate o una pasta de tomate.
7. Lácteos:
Por último, pero no menos popular, los lácteos, especialmente la leche, es una fuente de grasas saturadas por lo que sería mejor reemplazarla con leche semidescremada. En el caso del yogurt, busca aquellos que sean ricos en proteínas como el yogurt griego. Deja los batidos y helados pues tienen azúcares en exceso.
Ten en cuenta que además de dejar de consumir estos alimentos, debes complementar tu dieta con rutinas diarias de ejercicio físico, o todo este esfuerzo será en vano. Una vez que empieces a ver resultados y no doblegues para mantenerlos, podrás darte un gustito de vez en cuando.